Viajando con la música

Los Dubonim cantamos junto al moré Dami!


¡¡Hola amiguetes!! Así nos saluda el moré Dami cuando llega, acompañado de Dulcinea
Dami enriquece nuestros proyectos aportando nuevas canciones y acordes..."Chau, me voy de viaje".



Los Pishpeshim atravesamos la casita en un original tren…

Con el fin de movilizar la energía, despertar la curiosidad, la expresión, desinhibir las emociones y pensamientos, y llevar constantemente a los niños a la exploración, experimentación y disfrute de variedad de lugares…
 Jugamos con material desestructurado: cajas gigantes, medianas y chicas, con un lado abierto para encajar, con dos lados abiertos para hacer túneles, completamente cerradas para hacer torres y transformarlas, ricas e interesantes exploraciones apuntando al conocimiento físico, lógico matemático y simbólico.
En esta escena todos vamos a jugar al como si fuera… “te podrás imaginar todo lo que quieras” Y como con la imaginación podemos soñar  de repente las cajas fueron barcos que navegaban por el mar, autos que se desplazaban ruidosos, probando los motores…
Abrocharse el cinturón y a disfrutar de sus niños en plena acción.

Los Pilim nos damos la Bienvenida!

¡Hola, Hola! Para vos y para mí,
Hola, Hola! Este canto empieza así…
Despacito, mas ligero
Me lo pongo de sombrero, se me cae…
Lo levanto… y así termina este canto!

La hora de darnos la Bienvenida, ¡un momento que todos los Pilim adoramos!
En cuanto ven llegar la caja sorpresa de la mano de Pili, las caritas se iluminan y esperan con muchas ansias en sus sillas para darle unos  golpecitos  y “despertar a las fotos”.
Con entusiasmo los Pilim intentan imitar la “coreografía” de la melodía con la cual nos saludamos todas las mañanas aplaudiendo, moviendo las manitos y poniéndose el sombrero en la cabeza tal como dice la canción. Es hermoso verlos ya que se mueven con mucha gracia!!

“Paulatinamente se ha construido y va fortaleciéndose la comunicación afectiva de los niños con sus Morot y de ellos entre sí. El intercambio afectivo es imprescindible para el desarrollo en estas edades, pero la afectividad no evoluciona en solitario, está interrelacionada con otras conquistas de tipo personal, social e intelectual. Todas ellas configuran el mundo educativo a esta temprana edad”

Los Pishpeshim pintamos con espuma y plasticola


Acercarse a nuevas texturas no es un simple desafío… a través de las manos recibimos mucha información… conocemos el significado de las palabras  “pegajoso”, “frío”… así los Pishpeshim abren sus sentidos y se conectan con el mundo del arte …
Con ustedes sus “obras” y sus juegos!



Los Dubonim se fueron de viaje

Los juegos corporales estimulan el desarrollo motor de los niños.

“Chau, me voy de viaje”
Comenzamos a partir de la realidad cercana a los más pequeños.
Un cuerpo que narra la propia historia, sensible, capaz de hablar sin palabras, modelado socialmente y, a la vez, desafiantemente personalizado a partir de la vivencia individual de situaciones expresivas.
Papel protagónico: el auto, el desplazamiento depende de lo que los pequeños decidían… nos divertimos trasladándolos a través de un piolín sujeto a los autos, jugamos con velocidades,  marchando bien rápido-rápido-rápido y lentooooo; los deslizamos sobre puentes, túneles. Correr y frenar! esperar frente al semáforo rojo y paseando luego por caminos sinuosos en cuanto cambió a verde.
¡Continuamos nuestro recorrido en altamar! Así es, con barcos navegamos con ayuda de un gran paracaídas, pero cuidado con las grandes olas!! Que divertido sentir el vaivén de las mismas y hamacar a un compañero.
A remar marineros, a navegar...
Con Ustedes: ¡¡¡Los DUBO!!!

Los Pilim nos divertimos trasladándonos en un tren de cajas


Suena la campana y sale el tren, voy a hacer un viaje y vos también. A ver quién sube a mi fábrica de nubes y toca la campana de nuestro tren...